
La presidenta de la CEL, Beatriz Salazar, considera que “esta medida que se aplicará a partir de enero en los aeropuertos de Lanzarote y Tenerife Sur es del todo injusto para las empresas de transporte y, de manera indirecta, para todo el sector turístico”
La Confederación Empresarial de Lanzarote (CEL) ha expresado su preocupación ante la decisión de Aena de aplicar, a partir de enero, una nueva medida en los aeropuertos de Lanzarote y Tenerife Sur que afectará a la operativa del transporte colectivo, con la previsión de extenderse de forma progresiva al resto de aeropuertos de Canarias hasta 2027.
La presidenta de la CEL, Beatriz Salazar, reclama a Aena que retire esta medida por considerarla “del todo injusta”, al entender que puede generar un sobrecoste de hasta 6.000 euros al mes por empresa, impactando especialmente en pymes y en un sector “altamente estacional”. “No comprendemos esta medida y por eso nos sumamos al rechazo unánime de las empresas del sector y de otras organizaciones empresariales de Canarias”, subraya.
Salazar advierte de que la decisión “representa un golpe directo a la competitividad turística y a la cadena de valor del turismo en Canarias, y en concreto de Lanzarote”, al dificultar la operativa diaria de las compañías de transporte y afectar, de manera indirecta, “a la experiencia de los pasajeros”.
Asimismo, la presidenta de la CEL cuestiona que el tiempo de cortesía de 60 minutos anunciado “no se ajusta a la realidad de la operativa de las guaguas”, que en muchos casos deben permanecer varias horas en los aeropuertos por retrasos de vuelos, controles aduaneros o necesidades de posicionamiento previo. “Esta medida se presenta, por tanto, como una carga injusta y desproporcionada para las empresas locales”, añade.
Por último, Salazar insiste en la necesidad de buscar alternativas consensuadas con los sectores afectados, como “la creación de espacios de espera gratuitos”, y reitera la petición de la organización empresarial: “Que Aena retire esta tasa y permita un transporte colectivo eficiente, sostenible y justo para Lanzarote y el resto de aeropuertos de las islas”.