ASCAV denuncia que la modalidad de vivienda vacacional se está convirtiendo en un “cajón desastre”, lo que está conllevando a un desprestigio importante del sector.
Ya se ha convertido en una práctica habitual leer en titulares de medios de comunicación, como se anuncian tiendas de campaña colectivas en un salón, tiendas de campaña en azoteas, colchonetas inflables en viviendas, autocaravanas, barcos, yurtas y demás como viviendas vacacionales.
Es absolutamente inadmisible, que un sector que cumple y vela por la legalidad y fiscalidad de las viviendas vacacionales, se vea desprestigiado por unos malhechores que causan un perjuicio incalculable, no sólo por parte de las administraciones, sino también por la percepción social.
Es cierto que la Consejería de Turismo está redactando una Ley de Uso Turístico Sostenible de las Viviendas Vacacionales, pero no menos cierto es, que en estos casos NO SE TRATA DE VIVIENDAS VACACIONALES, sino que se está incumpliendo flagrantemente un Decreto 113/2015 que determina lo que cabe en la regulación y lo que no.
Desde ASCAV se solicita urgentemente mano dura por parte de la Inspección Turística contra estas prácticas a toda luz ilegales, ya que dañan no sólo a un sector alojativo importante, sino al conjunto de la imagen turística de Canarias. Una imagen, que especialmente daña al sector que representa.
Si cualquiera que entra en dichas plataformas puede encontrar este tipo, mal-llamado “alojamiento”, también lo puede encontrar la Inspección Turística para interponer sanciones ejemplares que eviten la proliferación de estos anuncios.
